Castellano -- ARCÁNGEL GABRIEL SOBRE LA CARIDAD

MENSAJE DEL ARCÁNGEL GABRIEL SOBRE LA CARIDAD

Por Marlene Swetlishoff

Guardiana de las Sinfonías de Gracia

The RainbowScribe

12 de febrero 2015

Amados,

Tengamos una charla sobre la cualidad del amor conocida como caridad. La caridad es la práctica del cuidar y del dar con benevolencia, de ser considerado con los demás y mostrar compasión por su actual estado de ser. También es aprender acerca de la importancia de la empatía dentro de uno mismo en relación con los demás, y cómo esta cualidad de amor expresada trae alegría profunda tanto al que da como al que recibe. La caridad es hacer actos de amor sin pensar en algo a cambio y está más allá de la mera bondad; es la pura alegría de dar, que incluye mucho más que las cosas materiales. Este dar desde el corazón puede tener muchas caras, como compartir una cálida sonrisa con un extraño, un abrazo alentador a un amigo o familiar, o una palabra amable de agradecimiento y aprecio. Cuando uno expresa la amorosa cualidad de la caridad, significa que poseen una amorosa tolerancia, compasión y paciente empatía por las fallas o errores de los demás percibidas. Todo esto se hace no por un sentido del deber o de responsabilidad sino desde la abundancia de calidez y amor que sienten brotar desde su interior. Cuanto más se es caritativo con los demás, más se nos regresa. Esta es la alegría del amor en acción, la manifestación externa de la caridad en la que una acción amable lleva a la otra. Un simple acto de bondad de una persona que arroje amabilidad en un área circundante y la acción tomada toca a un mayor número de personas de lo que la persona puede advertir.

La caridad es una de las virtudes más nobles y también es la más difícil de poner en práctica. Las personas que practican la caridad hacen cosas buenas por los demás desde deseo interior de entregar bondad benevolente así como su voluntad humana personal se transforma en voluntad de amar. Esto le da a una persona una mayor comprensión de lo que significa el amor en acción. Es un movimiento dentro del alma que entra en erupción cuando es atravesado por el reconocimiento de la conexión directa de un alma a otra. Este individuo siente una unidad con el otro y responde generosamente a su nivel de alma tan libremente como si la generosidad fuera para uno mismo. Ellos son impulsados por la voluntad espiritual, una generosidad de corazón que fluye sin esfuerzo para todos. Un generoso acto de caridad es un rasgo del alma que puede expresarse de muchas maneras tales como compartir su tiempo, energía, o sus posesiones. Cuando un corazón es guiado por una motivación interna abierta, de confianza, inspiradora, esa persona realmente ama a los demás. Sin importar cuánto se da de forma voluntaria, la profundidad emocional que sienten tanto el que da como el que recibe es siempre mayor que lo que se le dio. El corazón se desborda desde las profundidades del cuidado de uno en respuesta a las necesidades del otro. La caridad es un acto de creación y da a la gente la oportunidad de crear algo positivo y bueno. A medida que un corazón se abre, el individuo siempre responde a esta cualidad del amor que brota dentro de sí.

La caridad es un acto de buena voluntad benevolente hacia todos los seres vivos, incluyéndose uno mismo. La caridad benevolente es optimista cuando se aplica a la otra persona y podría tener muchos niveles. A veces llevar la carga del otro es una práctica espiritual profunda que lo lleva a uno a elevar el pensamiento de formar generosa hablar con generosidad y a actuar con generosidad. Esto significa que uno está practicando relacionarse con los demás como si fueran parte de la familia de uno. Pensar bien de los demás y hablar bien de los demás es la base para la donación caritativa. Cada acto de caridad generoso trabaja para hacer palanca abriendo el corazón un poco, así como se limpia un arroyo bloqueado por piedras. El flujo de espontaneidad en actos de caridad hacia la familia de uno y de la comunidad se sigue libremente. La caridad viene del corazón amoroso de una persona que está dispuesta a compartir abundantemente todo lo que se le da. Al expresar esta cualidad del amor se convierte en la acción que llevan a cabo mediante la traducción de su energía espiritual y la intención de donación física. El generoso acto de caridad promulga la cualidad de la voluntad de compartir y dejar ir el fin de que uno puede seguir su camino espiritual. Prestar atención a las necesidades de los demás es un acto generoso de caridad, que es una de las formas más accesibles para hacer eso.

La práctica de la cualidad amorosa de la caridad yace en el corazón de la práctica espiritual. Todo lo que una persona da con alegría libremente vuelve a ellos en igual medida. Devuelve bienestar a los que podrían auto-dañarse de alguna manera siendo también un acto de caridad como lo es darse generosamente perdón, tolerancia, buena voluntad y buena disposición. Desde una conciencia despierta estos individuos sirven con ecuanimidad a todos aquellos que vienen a buscar consuelo, curación o perdón. Esto unifica la energía del amor y la compasión dentro de cada individuo. La motivación del corazón de uno es de suma importancia cuando uno ofrece un regalo. La extensión de la generosidad de uno mismo y otros alegra el corazón, cura cualquier división, trae alegría y es una parte fundamental para vivir una vida espiritual. Cuando uno da lo mejor de lo que tiene y a veces dando más de lo que se dejan para sí mismos, es cuando se han rendido a su voluntad, a la voluntad del Infinito. Al dar a conocer lo que uno atesora más para satisfacer la necesidad del otro, refleja un acto divino de generosidad. Viven en el flujo de amor que tiene la capacidad de sacrificarse por los demás sin perder sentido de sí mismo. En un acto de caridad, pueden fortalecer su relación con un miembro de la familia al mostrar amor a través de todas sus acciones. Se abstienen de juzgar, criticar o hablar mal, y ver continuamente por las cualidades positivas de ese miembro de la familia. Ellos encuentran maneras de animar los lo que es de gran ayuda, y nunca dejan de expresar verbalmente su amor.

Los actos de caridad son esenciales para la vida espiritual, reflejando como lo hacen una conciencia de interconexión de todos los seres. Es una cualidad que da testimonio de la profundidad de la propia humanidad y la capacidad de uno para la auto-trascendencia. Se impone sobre las estructuras de clase que están en su lugar y proporciona una verdadera igualdad para todos en la sociedad. Debido a su esencia es la actividad creativa del corazón. La más rica de todas las personas es la que se comparte a sí misma, porque la verdadera riqueza de una persona se mide por su capacidad de compartir. La persona caritativa es amada por todos y su amistad es altamente muy apreciada. Ganan mayor fuerza espiritual al otorgar bondad y generosidad hacia los demás. Ganan más belleza, pureza y verdad en sus vidas y adquieren grandes tesoros del espíritu. La caridad infunde compasión, consideración y comprensión. El espíritu humano se ennoblece y se expande el corazón y es muy útil para el progreso espiritual y su evolución de la conciencia superior.

Que su vida sea una chispa en la llama de la caridad, para que el calor y la luz de este fuego de amor brillen cada vez con más intensidad y mantenga la esperanza en los corazones de la humanidad.

YO SOY el Arcángel Gabriel

Traducido por Andeléi

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